La Comisión Europea publicó una Propuesta de Reglamento por la que se establece un marco para el examen de las inversiones extranjeras directas en la Unión Europea y una Comunicación titulada "Acogiendo con beneplácito la inversión extranjera directa al tiempo que se protegen los intereses esenciales" el 13 de septiembre de 2017.
La Organización Europea de Puertos Marítimos (ESPO) se congratula de que la propuesta de la Comisión haga hincapié en la importancia de un entorno de inversión abierto. El sector portuario es capital intensivo.
En las últimas décadas, los puertos en Europa se han beneficiado de una inversión sustancial desde fuera de la Unión Europea, tanto directamente en activos como, en algunos casos, en importantes participaciones accionariales en los propietarios de puertos. El sector de los puertos reconoce el importante papel que estas inversiones han desempeñado en el desarrollo y el éxito de los puertos europeos. Por lo tanto, ESPO cree que tener un entorno de inversión abierto debe seguir siendo uno de los principios básicos de la política comercial de Europa.
ESPO acoge con satisfacción la propuesta actual de la Comisión en la medida en que proporciona un marco básico para los mecanismos de selección existentes en la Unión Europea, sin imponer a ningún Estado miembro el desarrollo de dicho marco.
Puede orientar a los Estados miembros que actualmente carecen de dicho marco, evitando decisiones políticas ad hoc sobre si puede o no producirse una inversión de un tercer país. También sigue la lógica de las políticas de selección existentes en los países que son socios comerciales importantes de la UE (EE. UU., Canadá, Australia, China, Rusia y Japón).
ESPO cree que una mayor transparencia entre los Estados miembros en inversiones extranjeras directas importantes puede ayudar a los Estados miembros en su toma de decisiones. La información recibida en aplicación del Reglamento debe usarse solo para ese fin. Es esencial que la Comisión y los Estados miembros garanticen la total confidencialidad a este respecto.
ESPO cree que la proporcionalidad y la coherencia deben ser primordiales en la implementación de cualquier mecanismo de evaluación para garantizar que Europa siga siendo un lugar atractivo para invertir en los puertos y que esas señales sean claras para los inversores. Los procesos de selección deben ser claros y objetivos. Los criterios y umbrales de detección deben ser claros y dirigidos específicamente a las causas de preocupación identificadas.
ESPO comprende el deseo de la Comisión de controlar las inversiones extranjeras directas que puedan afectar proyectos de intereses de la Unión y en relación con proyectos que implican una cantidad sustancial o una parte importante de la financiación de la UE (como la infraestructura RTE-T financiada por la UE). La Comisión debería respetar el mismo marco que los Estados miembros y demostrar una total transparencia en su política de selección.
ESPO cree que cualquier inversión en infraestructura portuaria esencial y crítica debe realizarse respetando plenamente las normas de competencia de la UE y las ayudas estatales. Las empresas extranjeras deberían estar sujetas al marco legal de la UE y evaluadas de la misma manera que las empresas europeas. Se debe prestar especial atención a ese respecto al principio del inversor en el mercado.
La política de competencia de la UE debe tener las herramientas para evaluar las inversiones extranjeras y las empresas en el mismo sector frente al nivel de juego en el sector del transporte marítimo y el puerto y tener una evaluación adecuada de la posición dominante en el mercado a ese respecto.
Finalmente, ESPO cree que el principio de reciprocidad y acceso no discriminatorio para las empresas de la UE a los sectores portuarios extranjeros debería ser la piedra angular de cualquier decisión sobre las inversiones extranjeras directas.